Competición de repartidores de periódicos: El padre de Dee Dee la entrena para pelear contra una pandilla de pícaros montados en bicicleta vestidos como ninjas que apuntan a su ruta de papel cada mañana.
Cambio de habitaciones: El padre de Dexter hace que él y Dee Dee cambien de habitación como castigo por haberse topado con él mientras peleaban y accidentalmente causando que se rompiese su trofeo de boliche. Dexter cree que Dee Dee está destruyendo su laboratorio y destruye su habitación en represalia. Sin embargo, Dee Dee ni siquiera entró en su laboratorio y Dexter luego fue castigado nuevamente por su padre, tanto por destruir la habitación de Dee Dee como por hacer que su trofeo de boliche se rompa nuevamente y por hacerlo cambiar de lugar con el perro por la noche. Irónicamente, mientras Dexter confía en que el perro no destruirá su laboratorio, el perro termina destruyendo su laboratorio.
Un juego de niñas: Dee Dee construye una casa en un árbol y permite que todos dentro excepto Dexter, en venganza por las numerosas veces que la echó de su laboratorio.